Sólo se necesitan unos minutos para que el motor de los purificadores de aire mantenga el aire limpio de alérgenos y contaminantes reduciendo los problemas de concentración y los contagios.
Estos aparatos están indicados para la desinfección del aire en oficinas, hostelería, fábricas, consultas médicas, aulas, gimnasios, comercios y otros lugares en los que la renovación del aire de las habitaciones por ventilación natural no sea factible y pueda conllevar problemas de confort térmico en épocas de frío o condiciones meteorológicas adversas.
Además, si abrimos las ventanas, el aire se renueva únicamente durante el tiempo que permanecen abiertas. En cambio, los purificadores de aire consiguen una renovación de manera continua, disminuyendo la concentración de patógenos durante todo el tiempo que permanecen en funcionamiento.
Nuestra recomendación es combinar ambos métodos, ya que las renovaciones de aire conseguidas por diferentes medios en una misma habitación de forma simultánea suman su efectividad.
Una vez encendido el purificador, continuamente filtra el aire contaminado de la estancia eliminado las partículas patógenas en suspensión, con lo que podrás respirar aire fresco libremente de nuevo.
